¿Hay algún problema más relevante y doloroso que los niños y las redes sociales, los niños y los gadgets, es posible una vivir sin redes sociales?
El libro de Amy McCready “Me! Me! ¡Yo! Cómo reeducar a un niño egoísta (o a sus padres)” se ha publicado recientemente.
En él, la autora -fundadora del programa de formación online para padres e hijos Positive Parenting Solutions Amy McCready- examina las consecuencias negativas del exceso de redes sociales en la vida de los niños y da consejos para enseñarles a usarlas con prudencia.
1. SUPERVISIÓN. ESTABLEZCA LOS LÍMITES
Limitar el tiempo que los niños pasan con los gadgets ayudará no sólo a que se dediquen a otras actividades más diversas e importantes, sino también a reducir el comportamiento negativo en línea.
He aquí algunos consejos de Amy McCready sobre cómo hacerlo:
Identificar y comunicar claramente las limitaciones tecnológicas. Los dispositivos electrónicos son una especie de privilegio del que se puede privar al niño si no sigue las reglas;
Supervisar a los monitores. Haz saber a los niños de antemano que vas a revisar su correo electrónico, sus redes sociales y sus mensajes de vez en cuando. Los mensajes inaceptables (para ellos o de ellos) pueden ser motivo de privación del acceso a la tecnología;
Establezca límites de tiempo. Establezca un toque de queda para los dispositivos electrónicos;
Apertura. Establezca una norma según la cual los dispositivos electrónicos sólo pueden utilizarse en habitaciones abiertas, como la cocina o el salón. Nada de ordenadores, teléfonos o tabletas en la guardería;
Sin secretos. Si ves que los niños intentan activamente ocultarte la pantalla de su dispositivo, abrir rápidamente otra pestaña, cerrar la pantalla o apagar rápidamente el dispositivo, lo más probable es que no estén haciendo nada bueno. Adviértales de antemano que ese comportamiento supone perder el privilegio de usar dispositivos electrónicos, y manténgase firme;
Sin conexión. Determina el tiempo libre de teléfonos y ordenadores, y la zona de la casa sin gadgets;
2. UTILIZAR LA ÉTICA SOCIAL DE LOS PADRES
Esto es necesario para no traspasar los límites del espacio de información personal del niño.
Minimiza tus publicaciones, comentarios y demás. Puedes hablar con los niños en persona o escribirles un correo electrónico;
Pedir permiso a los niños para unirse a sus amigos o marcarlos en una foto;
No te hagas amigo en línea de profesores, entrenadores u otras personas de renombre en la vida de los niños, a menos que a los niños no les importe. Si necesita ponerse en contacto con estas personas, envíe un correo electrónico;
Discutir los problemas en persona, no en línea;
Nunca avergüence a un niño en línea como castigo disciplinario;
Prepárese para que los niños hagan tonterías en las redes sociales, y no reaccione con demasiado ardor. Considere esos errores y omisiones como lecciones útiles.
3. ENCONTRAR TIEMPO PARA EL APRENDIZAJE TECNOLÓGICO
No puedes controlar lo que no entiendes.
Cuando se trata de tecnología, el conocimiento es poder, y si estás armado con ese conocimiento, puedes ayudar a los niños a utilizar los medios de forma segura y eficaz.
Así que, en primer lugar, busca en Google todo lo que puedas y pruébalo.
Otra opción es pedir a tu hijo que te enseñe.
Y cuando supere a su profesor, podrá tomar el control de forma segura.
4. MOSTRAR UN EJEMPLO POSITIVO DE VIVIR SIN REDES SOCIALES
La mayoría de los niños imitan el comportamiento de sus padres.
Se dan cuenta de cuando dejas el teléfono o la tableta en el patio. Nuestros “gracias” y “por favor” en la comunicación diaria les enseñarán estas palabras mejor que cualquier conferencia sobre el tema.
5. LA DEFENSA MÁS FUERTE CONTRA LA INFLUENCIA EXTRANJERA: LOS VALORES DE TU FAMILIA
A veces parece que sólo nos enteramos de lo que pasa en la vida de los demás: Las Kardashian, los vecinos de enfrente o la familia del amigo de Instagram de un hijo que has visto una vez en tu vida.
Para protegerte de esta influencia, lo mejor es determinar qué valoras en la vida de tu familia.
Para ello, responde a preguntas sencillas en las reuniones familiares:
¿Qué palabras pueden describir mejor a su familia?
¿Qué es lo más importante para su familia?
¿Cuáles son los puntos fuertes de su familia?
¿Cuál es la mejor manera de describir a su familia?
Las respuestas pueden ser, por ejemplo, “Nos respetamos” o “Podemos expresar nuestros sentimientos entre nosotros”
Anota todas tus ideas y pensamientos y cuélgalos a la vista. Ayudarán a tu hijo a formar su propia posición y actitud ante la vida, a pesar de todo el impacto social.